El proyecto no es físicamente una lámpara; tampoco es de papel. Pero sí posee su carácter.
El resultado, la traza de la nueva Biblioteca Municipal de Villaverde, sí es una lámpara de papel.
Es el nuevo fanal del barrio porque ilumina las madrugadas.
La lámpara es un objeto que mantiene el carácter doméstico, de ajuar, en la casa.
Y el barrio es nuestra casa.
Y la Biblioteca pertenece al barrio.
La lámpara necesita una habitación. La Biblioteca es el nuevo salón del barrio.
Es la sala de estar.
Y también aporta luz al conocimiento en Villaverde.
Como farolillo, es guía no sólo cultural sino también social en el barrio.
El papel es frágil, pero plegado adquiere cualidades físicas extraordinarias. La malla metálica que reviste el edificio se trenza, aumentando su resistencia empleando el mínimo material.
La Biblioteca Municipal de Villaverde se concibe como un nuevo lugar de encuentro y vivencias. Un lugar entre la casa y el barrio. Un nuevo ámbito donde poder reunirse, leer, hablar, consultar, relajarse.
Es una extensión de las zonas públicas del barrio. Se crea una plaza frente al acceso principal cuya apertura se realizará en las jornadas en las que se realice un evento. La plaza se introduce en el edificio proponiendo un graderío que salva la diferencia de nivel entre la calle Calcio y Aunon, un teatro al aire libre con cabida para recitales, cuentacuentos, presentar libros al aire libre … y pequeños conciertos.
